El mueble como atmósfera #Rafael Moneo

Rafael Moneo Vallés es uno de los arquitectos españoles más laureados y de mayor proyección internacional. Entre sus galardones destacan el premio Pritzker en 1996 y el reciente Premio Nacional de Arquitectura 2015. Pero muchos desconocen la vinculación de Rafael Moneo al mundo del diseño de mobiliario, un vínculo que le ha acompañado desde el inicio de su carrera profesional y que forma parte de su visión personal de la arquitectura.

Mis muebles aclaran las intenciones en términos atmosféricos de mi arquitectura. Rafael Moneo, 2003

Gran parte de sus trabajos tempranos giraron en torno al diseño de mobiliario, contándose entre ellos el diseño interior de la desaparecida Galeria Huarte en La Castellana, que desarrolló trabajando en el estudio de Sáenz de Oíza, la silla vencedora del concurso para H Muebles en 1959 o los muebles económicos para el concurso del Ministerio de Vivienda en 1960. A partir de entonces, casi todos sus edificios han incluido algún mueble o complemento desarrollado como parte del proyecto arquitectónico con la intención de reforzar la expresión de la obra.

De igual manera que las obras de Moneo incluyen una acusada variedad formal, debido a la intención de su autor de encontrar una solución específica para cada caso, también el mobiliario desarrollado para ellas incluye una amplia variedad de referencias estilísticas distintas: marcadamente aaltiano en la silla para el concurso de H muebles o en la silla Oria que diseñó para su vivienda en 1965, racionalista en el mobiliario para el Ayuntamiento de Logroño (1973-1981) o en las sillas de tubo para el Hospital Gregorio Marañón (1996-2003), cercano al Arts & Crafts en el mobiliario que diseñó para el Museo de Arte Romano de Mérida (1980-1986), hasta llegar a las expresivas lámparas que definen el espacio de la Catedral de Nuestra Señora de Los Ángeles (1996-2003).