Modernidad y tradición en la obra de José Antonio Coderch #Coderch

José Antonio Coderch, uno de los autores que reintrodujeron la modernidad en la arquitectura española a finales de los cuarenta, es también el diseñador de cuatro piezas que fue utilizando y perfeccionando a lo largo de su trayectoria como arquitecto: las chimeneas Capilla (1952) y Polo (1955), la persiana Llambí (1953) y la lámpara Disa (1957). Su aproximación a la arquitectura moderna parte de una interpretación personal paulatinamente depurada de la arquitectura tradicional que le supuso el reconocimiento nacional e internacional.

Para él, el confort, más que una acumulación de objetos cualificados, es la creación de un tranquilo paisaje en el que la continuidad material y formal se constituyen en virtud positiva (…). Lluís Domenech Girbau, La célula y el organismo, 1987

Coderch rediseñó la tradicional persiana de librillo para usarla como forma de relación con el exterior y protección frente a la iluminación directa en muchas de sus viviendas unifamiliares. En obras de mayor envergadura como el edificio de viviendas en la Barceloneta (1952), estas persianas son también un recurso importante en la composición de la fachada.

La preocupación por la calidad del interior y la relación entre tradición e innovación están patentes en el diseño de las chimeneas de chapa metálica Polo (1952) y Capilla (1955), que ocupan un lugar fundamental en el interior de proyectos como la casa para el pintor Antoni Tàpies o la reforma de la casa Senillosa en Cadaqués.

El diseño de la lámpara Disa, que obtuvo en 1962 el Premio Delta de Oro ADI/FAD, responde al intento de conseguir para la iluminación artificial, filtrada por las lamas de madera, la calidez que transmiten el fuego en el hogar o la luz del sol tamizada por las persianas. Usada en proyectos como la rehabilitación de una masía para su vivienda personal, esta lámpara participa en la focalización espacial y el ambiente del interior en que se usa.