
La instalación se divide en dos áreas de marcado contraste. La primera es un entorno claro, envolvente y luminoso, que evoca la sensación de una excavación en una cantera. Este ambiente se construye con piedras claras, donde la luz natural fluye suavemente, resaltando la vibración de las texturas marmóreas. Más que un simple espacio de tránsito, funciona como un lugar de contemplación, donde los bloques pétreos se transforman en bancos y sofás. Sus superficies, a menudo con bordes irregulares propios del corte de extracción, refuerzan la sensación de lo primitivo y orgánico.




En contraste, el segundo espacio es oscuro y retroiluminado. Aquí, una cuarcita negra genera una atmósfera densa, casi volcánica. La iluminación, filtrada a través de los ónices, evoca el brillo incandescente de la lava.
El diseño se inspira en la geometría fragmentada de los estratos y las excavaciones de las canteras. Una estructura de molduras en el techo sigue las líneas generadoras de la composición, organizando el espacio y del que se suspende la instalación.




El contraste entre ambas zonas se acentúa con los acabados, que alternan entre superficies opacas y traslúcidas. Este juego visual se complementa con una experiencia sensorial más profunda: la música, compuesta exprofeso, intensifica la atmósfera, mientras los aromas, cuidadosamente seleccionados, evocan el entorno natural. Todo está diseñado para transmitir la majestuosidad de la naturaleza, permitiendo al visitante experimentar la presencia de montañas y rocas de manera envolvente.
Arquitecto y diseñador
Ramón Esteve
Colaboradores REE
Patricia Sancho
Ana Príncipe
Tudi Soriano
Espacio
Gómez Grau
Colaboradores externos
Simon – Iluminación
Valpaint – Pintura texturizada
Material utilizado
Espacio cantera
Cráter
Patagonia Hidrofinish
Taj Mahal Lehater
Ivory Lehater acabado piel
Ivory tallado a barreno
Espacio volcánico
Cristalo Marrón
Etna Black